La tecnología LED fue desarrollada por la NASA en una de sus investigaciones. Entre sus muchos usos se descubrió su efectividad para
tratar problemas de la piel.
Al igual que la tecnología láser o la luz pulsada (IPL), los LED son una energía lumínica que tiene múltiples efectos beneficiosos. Presenta diferentes colores o longitudes de onda, cada una de ellas actúa de manera diferente sobre la dermis. Por ejemplo la luz roja estimula la formación de colágeno, la azul es antiinflamatoria y bactericida, la amarilla reduce el enrojecimiento y la irritación entre otras. Normalmente se utiliza una combinación de ellas para conseguir nuestro objetivo ya sea como antiaging mejorando la apariencia de la piel o para tratar el acné o la rosácea. También nos ayuda a mejorar el post de tratamientos médico-estéticos gracias a sus propiedades antiinflamatorias.
El procedimiento es indoloro y muy sencillo. Es recomendable realizar un mínimo de seis sesiones.
Al igual que la tecnología láser o la luz pulsada (IPL), los LED son una energía lumínica que tiene múltiples efectos beneficiosos. Presenta diferentes colores o longitudes de onda, cada una de ellas actúa de manera diferente sobre la dermis. Por ejemplo la luz roja estimula la formación de colágeno, la azul es antiinflamatoria y bactericida, la amarilla reduce el enrojecimiento y la irritación entre otras. Normalmente se utiliza una combinación de ellas para conseguir nuestro objetivo ya sea como antiaging mejorando la apariencia de la piel o para tratar el acné o la rosácea. También nos ayuda a mejorar el post de tratamientos médico-estéticos gracias a sus propiedades antiinflamatorias.
El procedimiento es indoloro y muy sencillo. Es recomendable realizar un mínimo de seis sesiones.
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